Luego de un viaje largo en avión de Buenos Aires a Santiago y tras meses de ausencia mi mujercita me recibió como un rey, creo que podría decir que incluso fui para ella como un héroe nacional y la verdad es que estaba cansado por cargar las maletas y el viaje, solo quería dormir weones pero ella que tanto me extrañó me sirvió rica comida y no dejaba de darme besos y caricias, cuando estuve por echarme a dormir ella insistente como nunca me agarró el pico hasta ponerlo duro y luego lo apretó con la mano derecha y me dijo que lo quería dentro, me mostró su choro y en efecto estaba muy húmedo, cinco minutos de descanso y me la atravesé de lo lindo!

Regresé de viaje cansado y con sueño pero mi maraca quiso darme el choro para divertirme un rato