Fierros en la vagina, dolor y placer con una tetona

Aprovechamos que tuvimos unos días libres en el trabajo para poder irnos a la playa, ella es Valería, una chiquilla hermosa de la oficina y que por suerte para mí ya no está con ese pololo que tan abandonada la tenía, me apena cuando eso pasa, porque la vi triste varios días y mantuve mi distancia para no incomodarla, pero pasado un tiempo empezamos a fortalecer nuestra amistad aunque claramente yo no quería amistad, yo quería a esa mina como amante, esas camisas que usaba dejaban notar esas preciosas tetas que yo sabía se ocultaban tras esa ropa.

Las cosas se dieron para bien, ahora ya me he culeado a esa mina varias veces, pero si debo mencionar algo de ella que me gusta y me sorprendió en un primer momento fue ver su vagina perforada y con pendientes, aretes, fierros y esas cosas que le dan mucho más placer, además que tiene unas tetas preciosas weones, nunca hay que dejar a una mina linda de lado, siempre pueden haber sorpresas ricas no visibles al principio.