Carolina Sweets estaba teniendo una conversación muy erótica y sucia con el pololo, esa charla fue escuchada por el padre de la rubia, una angelical rubia dicho sea de paso y sintió curiosidad por saber cuánto había madurado la pequeña, ya es grande, una chiquilla de 20 años o quizás más y por eso le pica la chucha, se tocaba mientras hablaba con el pololo, el viejo conversó con ella pero no para regañarle ni nada, al contrario quiso enseñarle algunas cosas sexuales para que ponga en práctica con su pololo, ella se sorprendió de ver enorme pichula y la chupó con mucho amor, le dijo a papá que se la meta por el sapo ya que estaba muy caliente la mina.