Parece inocente pero no se dejen engañar, esta golfa hermosa se llama Ashley Anderson y estaba metida en ciertas cosas de legalidad cuestionable, tenía que ir a Países Bajos desde Nueva York, pero la detuvieron en el aeropuerto para una inspección rigurosa, la chiquilla andaba algo sospechosa, el agente le dijo que debía mostrar todo el cuerpo desnudo para saber si no estaba llevando algo ilegal consigo, estaba demasiado buena, deliciosas tetas y bonito culo, ella imploraba por una segunda oportunidad y la obtuvo, pero con una soberbia culeada de por medio, con la carita llena de crema la mina agradeció por esa segunda oportunidad para compensar los daños... además que le gustó mucho esa leche.