Tengo unos vecinos bastante amigables, son una pareja liberal pero nunca pensé que me pedirían participar en sus tiradas tan escandalosas en su apartamento, un día el marido me habló y me pidió el favor de tirarme a su mujer, una mina bien culona y apetecible, me explicó que le gusta ver cómo se la culian y acepté. Un día después y con el pico bien rasurado me la puse en cuatro a la mina y mientras el marido grababa y se pajeaba yo me culiaba con fuerza a esta perra, le gusta bien duro porque me gritaba que se lo diera con más fuerza, con esa faldita subidita la verdad es que la pasé genial con estos vecinitos.