Pasan los años, pasan las décadas y este moreno sigue haciendo desmanes en los culos de todas las minas a las que se coge, es probable que muchas de ellas no sean las mismas después de ser penetradas por esa monstruosidad, pero es una de esas experiencias que ellas no quieren perderse, eso mismo pensó Brooklyn Chase cuando se atrevió a seducir a Shane, la mina sabía que bajo ese pantalón se ocultaba un pico monstruoso y quiso probarlo, él era consciente de que podría causarle efectos colaterales así que para lubricarla bien le lamió la vagina, luego ella hizo lo propio mamando esa cosa enorme aunque fuera más grande y no cabía, pero montar la tula del moreno fue algo que ella nunca olvidará.