Jenna Jay escribió en su diario todas las aventuras sexuales que vivió meses antes, años antes, ella sin embargono siempre ha sido muy cautelosa sobre dónde deja ese diario y por eso al empezar el video vemos a una rubia preciosa excitándose mientras lee esos escritos y revive en su mente todo lo que Jenna experimentó, ella estaba en la cocina con el pololo, solo querían preparar una rica cena, pero esos placeres culinarios en ocasiones a esta culona le despiertan los instintos sexuales, caricias vienen y van y cuando menos lo piensa la perra ya está con una boca chupadora de clítoris en su vagina, ella más extasiada no podía estar, salvo cuando la penetran, es la gloria para ella, una mina gimiendo siempre es hermoso de ver.