Teanna Trump era la arquitecta encargada de supervisar la construcción de esta casa para personas de bajos recursos, un acto de bondad que muchos le agradecen, la mina fue a inspeccionar a los trabajadores pero estaba con un diminuto pantaloncillo que dejaba ver todo su precioso culo, los hombres estaban sedientos y tensos, ella de pronto notó ciertas miradas de deseo, se preguntaba si sería buena idea protagonizar un bukkake extremo porque eran una veintena de hombres por lo menos, cuando menos lo piensa ya estaba chupando picos a diestra y siniestra, le gustaba, lo duro y caliente de esas pichulas a ella le encanta, pero por poco la dejan sin aire, fue brutal pero estuvo satisfecha, toda esa leche la hizo sentir cerda, disfrutó que es lo que vale al final. 

La arquitecta Teanna Trump chupó tantos picos que quedó en shock

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