Esta bonita mujer llegó con cierta dificultad a casa de su amiga, las minas hablaron de cosas íntimas, se masturban estando en la ducha y lo hacen las dos, ambas se confiesan eso, la más alta y hermosa es Marie Clarence, una bella francesa que se siente feliz de tener un marido macho y de pico grande, la satisface cada noche, pero no tiene la misma suerte su amiguita quien está soltera y hace mucho tiempo no tiene sexo, así que la dulce Marie se siente mal por ello y ordena al marido cogerse a la amiga, cosa que pasa y vemos cómo la perra tenía el sapo con hartas ganas de que un macho de verdad se la rompa por detrás.