Cuando se podía viajar, uno de mis destinos favoritos más allá de cuestiones pandémicas y demás, es China, porque conocí a Lian, una chiquilla lindísima que habla bien inglés y gracias a eso nos metimos a su casa a culear rico, yo estaba ahí para vacacionar porque antes había ido solo por negocios, la mina al principio era algo seria... pero una vez que tuvo más confianza conmigo fue muy cariñosa, de hecho ella tuvo la idea de esta cacha, la noté muy ansiosa, cuando estuvimos en la intimidad y saqué la pichula ella no paraba de mamar, los ojos los tenía con las pupilas dilatadas, me asusté al principio pero la perra chupaba tan bien que el clímax máximo fue enterrarle la tula en su chucha, fue increíble.