Cuando salgo a carretear lo hago con mi polola y algunos amigos, ya no puedo caer en la tentación de conocer alguna maraca para tener dónde abrigar mi pico por las noches, pero ella lo hace con mucho amor, es muy linda y me dice siempre que luego de comer una pizza para bajar los efectos de la chela debo darle pico caliente y duro, así es como ella termina los fines de semana, con la boca llena y yo con las bolas casi hechas trizas, ella me dice que puedo no tener el pico más imponente del mundo pero es saladito y sabroso, no le doy unas nalgadas solo porque sus orales son sublimes, aunque me deje muy remangada la tula.

Después de un carrete no hay nada mejor que una buena chupada de mi polola