Por el acento estas golfitas son británicas, lo que ocurre aquí es que la profesora estaba entablando una interesante conversación con sus pupilas, ellas estaban ansiosas por recibir los consejos de amor de una mujer mayor y empezaron a hablar de sexo, tremendas cerdas resultaron las minas, pero de pronto apareció un profesor con un rango mayor y más estricto y les explicó que no podían hablar de cosas sexuales en el colegio, pero las minas estaban ansiosas por poner en práctica lo aprendido en teoría, así fue como convencieron al profesor de dejarles mamar pichula y una de las minas se animó a chupar primero, tuvo el arduo trabajo de quitarle la flacidez a esa tula y luego siguió la profesora, gozaron mucho las perritas.