Aria Lee ya ha tenido cachas interraciales y siempre ha salido muy satisfecha, pero esta vez es algo especial, la mina pensó que un blanco se la culearía como suele pasar, ella se había afeitado bien la chucha y estaba muy linda, empezó a masturbarse pues la perra es algo que hace siempre para ir calentando el sapito pues cuando se la penetran siempre se vuelven locos sus amantes, no quiere correr riesgos, pero cuando apareció sorpresivamente este enorme negro ella se quedó sin palabras, más muda quedó al ver el tamaño del pico, se le hacía agua la boca, Aria estaba mojándose, mamó la pichula y cuando se sentó en ella, su gemido de dolor fue muy elocuente. 

Aria Lee nunca había chupado un pico así de grande, quedó complacida

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