La explicación a esta bizarra situación es que Madison Ivy tiene un pololo pugilista, quiere llegar a las grandes ligas y ganar todas las peleas en su categoría de peso gallo, Madison fue a verlo entrenar y de paso para darle ánimos, para que llegue a la cima acompañado de una hermosa mujer, hay algo mejor que eso?, pero ella se excitó viéndolo sudoroso y musculoso, cada gancho de izquiera y contacto en la cara del rival era un chisguetaso de fluidos vaginales para ella, hasta que no pudo más, se subió al cuadrilátero y este weon totalmente en modo ataque se la metió por la boca y el culo contras las lonas hasta dejarla casi para tirar la toalla, pero quería venirse por completo.